Una chica. Un chico. Diferentes paises. Ella es terca. Él es adorable. Miles de secretos y un solo problema. Ella tiene miedo al amor. Él quiere enamorarla.

domingo, 10 de marzo de 2013

Capitulo 5.





De nuevo lunes, odioso lunes. El domingo había pasado el día durmiendo y terminando los deberes para hoy, y no es que fueran pocos. Hice mi rutina diaria. Cuando me quise dar cuenta ya estaba sonando el clacson del bus. Preparé mi mochila corriendo y bajé, pero ya no estaba. Mierda, debía ir andando y quedaba a una media hora. Empecé mi camino. El tiempo hoy era nublado y se notaba que en poco tiempo empezaría a llover, que por desgracia fue a mitad de camino. Me refugié debajo del toldo de una cafetería. Llegaría bastante tarde pero tampoco tenía intención de llegar como si me hubieran tirado a una piscina.
-Buenos días, ___.
Alguien susurró en mi oído. Me giré para quedarme frente a esos ojos marrones que tanto me gustaban pero a la vez odiaba de ver.
-¿Qué quieres? Mas bien, ¿qué haces aquí?
-Desayunar.
-Deberías estar en clase.
-Tú igual.
Sonrió. Yo solté un bufido, me tapé un poco con mi chaqueta y comencé a caminar rápido. La tormenta no había menguado nada así que llegaría empapada a clase. Noté como algo me tapaba e impedía que me siguiera mojando. Miré encima de mí y ví un paraguas.
-¿Qué quieres Greyson?
-Los dos tenemos que ir a clase, y yo llevo paraguas. ¿O prefieres mojarte?
Simplemente no contesté. Caminamos hasta el instituto con el sonido de la lluvia y el tarareo de la voz de Greyson. Era lindo. Habían pasado 45 minutos desde que habían empezado las clases, así que teníamos que esperar hasta la siguiente clase para entrar. Fuimos hasta la cafetería y nos sentamos. Cogí mis cascos y me los puse, alejándome del mundo con el sonido de la música.
-¿Por qué me odias tanto?
Me arranqué un casco y lo miré. Ni yo misma sabía el porqué.
-No lo sé, es de naturaleza. Odio a todo, o casi todo el mundo, no puedo no hacerlo.
-Así no conseguirás hacer amigos.
Me eché a reir. ¿Quién quería amigos? Yo iba perfecta con los poco que tenía, eran los mejores a pesar de que fueran pocos. Sonó el timbre que indicaba el final de las clases y el comienzo de otras. Me levanté y comencé a caminar por el pasillo hasta que alguien cogió mi muñeca para hacerme girar quedando frente a él. Greyson.
-¿Qué ocurre ahora?
-No seas así. Déjame conocerte, por favor.
Su voz había sonado como una súplica y su cara demostraba que de verdad quería hacerlo. Lo miré y por primera vez desde que lo conocí le sonreí para luego asentir y marcharme. Le dejaría conocerme, como él bien ha dicho, nada más. 






{Quiero dedicar este capítulo a Olaya por su cumpleaños que espero que se lo pase genial y agradecerle muchisimo por leerle esta novela. ¡Muchisimas felicidades cielo!‹з}

2 comentarios:

  1. Tengo que decirte dos cosas:
    1. Escribes genial
    2. Me encantan los cinco capítulos que he leído :D
    ¿Podrías avisarme cuando subas más?
    Soy @MAFGdreamer :3

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