Capitulo 9.

-____, ¿qué pasa?

Alicia giró hasta quedarse delante mio mirándome. ¿Qué le iba a decir? ¿Qué tenía miedo de ir allí? ¿Qué estaba intentando esquivar a Greyson y ahora se clavaba en el único lugar en el que puedo ser yo misma? ¿Qué mi mejor amigo lo conoce? Espera. Giré de nuevo para mirar a Cody, ¿de qué se conocían?

-¿Vamos o no vamos? ____, creo que no hemos venido aquí para nada.

-Si.. si, vamos.

Nos acercamos hasta ellos. Yo intentaba no mirar a Greyson aunque sabía que él si que me miraba a mi. Miré a Cody y ví una sonrisa en su cara. ¡Él lo sabía!

-Ya tardabais en venir ____.

-Estábamos haciendo unas cosas, ¿entramos o qué?

Aceleré el paso hacia dentro del local con Alicia a mi lado. Ella era la única que no lo sabía pero supongo que algo se imagina. La noche se pasó rápido entre bailar y esquivar a Greyson, se pasó rápido. Tuve que acompañar a Alicia hasta la salida ya que se tenía que ir y me quedé un rato allí afuera. La música sonaba alta, no se como la gente que vivía por aquí cerca podía dormir. Note una manó en mi brazo haciéndome girar. Quedé delante de esos ojos marrones. “Mierda”.

-¿Qué se supone que te pasa?

-¿Qué me va a pasar a mi?

Bufé y me solté de su agarre. No pensaba salir corriendo, ¿o si?

-¿Por qué siempre me esquivas?

-No te esquivo, solo… no coincidimos.

-¿No coincidimos? ¡Joder ___, deja de ser tan terca!

-¡No soy terca!

Giré y empecé a andar hacia mi casa. Ya se me habían pasado todas las ganas de fiesta. Otra vez noté su mano girarme, pero esta vez no del brazo, sino de la cintura. Tampoco vi sus ojos, sino que sentí sus labios contra los mios. ¡Me estaba besando! Quise apartarme, pero algo en mi hizo que pasa mis brazos por sus hombros y apoyara mis manos en su nuca. Le quería, si, pero yo no quería quererlo. Nos apartamos por falta de aire y pude ver sus sonrisa. ¿Él me quería?

-____...

-No.

Le interrumpí y me solté.

-Nos vemos el lunes.

Me giré para seguir por mi camino. Tenía mucho en lo que pensar y ahora no quería explicaciones de nadie y menos de él. Llegué a casa y me tiré encima de la cama. Ignoré por completo el que aún llevara la misma ropa de la discoteca. “Espera, ¿le quiero?”